Aprende todo sobre la depilación


La depilación ha acompañado al ser humano desde los inicios de la humanidad. Al principio  era afán de supervivencia y seguridad, más tarde se convirtió en motivos de higiene y estética.

En los últimos años, los sistemas de depilación han evolucionado a un ritmo vertiginoso. Tenemos a disposición infinidad de métodos y sistemas adaptables a todos los bolsillos. Unos son definitivos y otros temporales, aunque cada uno tiene sus ventaja y desventajas.

Los sistemas definitivos son permanentes o casi permanentes. Sus alternativas son: la electrólisis, la fotodepilación y el láser.

La electrólisis se efectúa por medio de ondas o elementos químicos que actúan en los folículos pilosos (fuentes de crecimiento del pelo) por medio de micro cánulas.

La fotodepilación y el láser destruyen los folículos directamente con descargas.

Los sistemas temporales son más numerosos. Cera, depiladoras eléctricas, crema, azúcar, hilo, pinzas y cuchilla.

La cera tiene dos tipos: fría y caliente. Su duración suele ser 3 ó 4 semanas.

Las depiladoras eléctricas son efectivas con utilización frecuente. Puede producir irritación.

La crema: desintegra el pelo. Los resultados suelen durar entre 4 días a una semana.

El azúcar no es muy popular pero tiene excelentes resultados. Resulta económico y proviene del Antiguo Egipto.

Con hilo es empleado en la India y Medio Oriente. Son hilos de algodón roscado que se aplica a cada uno de los vellos.

Las pinzas son prácticas y rápidas. Se suelen usar para zonas pequeñas como el rostro.

La cuchilla es el método más simple y barato. Es elegido por los hombres y rehuido por las mujeres por las connotaciones masculinas.